lunes, 21 de agosto de 2023

INQUIETUDES

  

 

INQUIETUDES

 

 

-Preguntan los amigos del bien decir:

 

Pueden emplearse correctamente expresiones como:

 

1. El gobernante da mucho de qué hablar…

2. Pareciera que la frontera está cada vez más borrosa

3. ¿Por qué esa fastidiosa inflexión del verbo parecer: “pareciera”, está tan de moda y se emplea en todo y por todos?

4. ¿No hay una inflexión verbal más sencilla, menos rebuscada?

 

Amigos

 

Para dar respuesta adecuada a sus inquietudes acudí a la fuente que es la RAE y esto conceptuó:

 

 “La expresión que recogen los diccionarios es: dar que hablar, en la que el pronombre relativo que no lleva tilde.

Sin embargo, también se emplea, y está bastante extendida, la forma: dar de qué hablar, que equivaldría a dar motivos para que se hable, dar materia para comentarios, y en este caso se escribe qué, con tilde.

“Pareciera: es escogencia personal de léxico para llamar la atención y para no comprometerse  con lo que dicen, o forma antiquísima y poco usada de verbo que ponen de moda…”

“No sabemos por qué se pone de moda una expresión”.

 

-      Yo opino:

 

Acabo de leer en un periódico esto: “Hay mucho de (en) Colombia que me recuerda mi infancia; pareciera que estuviera en casa”:

a) En la frase hay una cacofonía horrorosa: pareciera-estuviera; que desluce el idioma.

b) ¿No es más elegante, sonoro, apropiado y menos melindroso decir: me recuerda mi infancia; es como si estuviera en casa?

c)” Pareciera” es una inflexión verbal del verbo parecer, llamada pretérito imperfecto, del modo subjuntivo. Un modo casi inusual y difícil en su conjugación. Por eso este vocablo suena extraño y a veces “melindroso”, “remilgado”.

d) En la conjugación de los verbos en español hay los siguientes modos:

* Modo indicativo. Es el modo de la realidad. Todo cuanto con él se expresa, sucede, sucedió o sucederá realmente.

* Modo subjuntivo. Es el modo de la posibilidad, de lo que puede llegar a ocurrir o no; de la duda; de la no seguridad en afirmar algo. En este modo está ubicado el “pareciera” que la RAE propone cambiar por: “al parecer”; “a lo que parece”.

* Modo imperativo. Es el modo de las órdenes, de la sugerencia, la diferencia está en el hipertono: ¡Salga de ahí!  Salga de ahí.  Es un modo que solo tiene un tiempo: el presente.

e) Y ese “pareciera” que no resuelve nada, pero que a algunos les parece sofisticado, elegante, de valor estilístico, se ha convertido en simple “muletilla”, (palabras sobrantes que no explican ni aclaran nada); un vocablo “fastidioso” como suelen decir algunos amigos de la sencillez.

 

4. Cómo emplearlas…

a) Las palabras llanas terminadas en ESE son invariables; su forma singular y la plural son iguales: la crisis / las crisis; el virus / los virus; el tenis / los tenis;  la tesis / las tesis….

b) El gentilicio de los nacidos en Gaza es: gazatí, gazatíes.

c) Cognitivo/a: (de cognición). Relativo al conocimiento.

d) Cognoscitivo/a: (del latín “cognoscere”, conocer). Que es capaz de conocer: su potencia cognoscitiva.

 

5. Curiosa respuesta de la RAE

 

“Hola, tengo un dilema. Hoy hablando con mi peor es nada, me di cuenta que puedo decir que una correa es negrA, pero no que es marronA. ¿Por qué? ¿Estamos discriminando a las marronAs? Gracias por tu atención”, esta fue la consulta formulada en Twitter por Betibú.

La Real Academia Española respondió:  

“Hay adjetivos de dos terminaciones, como «rojo, -ja», «amarillo, -lla», «listo, -ta», y otros de una sola terminación, válida para el masculino y para el femenino, como «marrón», «azul» o «imbécil»”.

¿Habrá alguna connotación especial en la respuesta de la RAE?

 

6. ¿Cómo escribir: ¿osea, o sea?

 

El Diccionario de la lengua española registra: “o sea” en dos palabras. El Diccionario panhispánico de dudas explica que no es correcta su escritura en una sola palabra (osea). 

Esta misma obra señala que o sea permanece en singular aunque al verbo ser le siga un sustantivo plural, ejemplo: Veintinueve semanas, o  sea, siete meses (es forma incorrecta: veintinueve semanas, o sean, siete meses).

Lo habitual es poner coma después de esta locución cuando introduce una explicación, precisión o reformulación del elemento precedente (Más del 60 % de la variabilidad en la tolerancia al dolor proviene de factores hereditarios, o sea, genéticos).

Conviene distinguir entre la locución: o sea y el adjetivo: ósea, este sí escrito en una sola palabra y con tilde, con el que se alude a lo perteneciente o relativo al hueso: médula ósea, no médula oseamasa ósea, densidad ósea, no densidad osea.

 

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario